Ante la inestabilidad económica y financiera, cada vez son más las personas que buscan cómo invertir su capital para obtener un rendimiento constante por él. Ante la diversidad de opciones disponibles, hoy queremos distinguir entre el asset management y el wealth management. Se trata de dos conceptos que pueden confundirse, y que te conviene saber diferenciar antes de invertir tu dinero.
Diferencias entre asset management y wealth management
El asset management y el wealth management son dos conceptos con definiciones y características que difieren entre sí. Lo que tienen en común es que hacen referencia a la gestión de los recursos que posee un individuo, de manera que se obtenga una rentabilidad por ellos que derive en beneficios. Pero, dado que son más las diferencias, y que estas parten desde su propia definición, a continuación te las mostramos para que puedas tener una comprensión clara de lo que significan estos conceptos.
Definición
El asset management hace referencia a la gestión de los activos de una persona. Son, por ejemplo, las opciones de inversión que ofrecen las entidades bancarias. Consiste en la administración de activos móviles, como acciones, fondos de inversión a largo plazo o títulos de renta fija, entre muchos otros, que conforman una cartera de inversión.
Esta cartera se elabora en función del riesgo que quiera asumir la persona inversora y de su perfil concreto. Es decir, que según el conocimiento que se tenga de finanzas, de las circunstancias personales y el riesgo que se esté dispuesto a tolerar, los productos que se recomendarán y que formarían su cartera, variarán.
Para valorar el perfil de una persona interesada en la gestión de sus activos o asset management se utilizan los tests de idoneidad. Mediante estos, se puede identificar la situación financiera, los motivos que le llevan a querer invertir, su experiencia y sus conocimientos. La obligación de la entidad es ayudar a tomar la decisión correcta para que contrate el producto que mejor se adapta a los datos mencionados.
El wealth management, por el contrario, hace referencia a la gestión de patrimonios. Aquí ya podemos observar una diferencia notable entre asset management y wealth management, que facilite su comprensión. Mientras que ‘asset’ significa activos, ‘wealth’ equivale a riqueza; es decir, que engloba todo el patrimonio que una persona posea. Es, por tanto, un concepto más amplio que el anterior, y busca consolidar tanto el patrimonio actual como el futuro.
Funciones
El asset management se considera una categoría inferior al wealth management. Dentro de la gestión completa de un patrimonio, se incluyen las carteras de inversión. La diferencia más importante se da en el enfoque y en las funciones que engloba cada uno de estos conceptos.
Como hemos dicho anteriormente, en la gestión de carteras se tiene en cuenta el perfil inversor de la persona, sus circunstancias o el riesgo que es capaz de tolerar. Por lo tanto, se busca un producto que sea adecuado para todas estas características.
En la gestión de patrimonios se deja a un lado esta idoneidad específica para el perfil de la persona, puesto que el objetivo principal es la protección del patrimonio. Para que esto sea posible, es imprescindible contar con una planificación que incluya decisiones de inversión, fiscales, legales y financieras que sean adecuadas.
Estrategia de gestión
La estrategia en la gestión es otra de las diferencias más notables entre el asset management y el wealth management. En el primero, el enfoque es más sofisticado y tiene la particularidad de que suelen ofrecerse productos propios. Si volvemos al ejemplo de las entidades bancarias, este asesoramiento suele ser no independiente.
¿Y esto qué quiere decir? Que la entidad recomienda tanto productos que son propios como otros que no lo son, lo que puede llevar a conflictos de interés porque tenderá a poner la atención en los que le pertenecen.
En contraposición, se encuentra el asesoramiento independiente (en el que se basa el wealth management), que recomienda los productos más adecuados del mercado. Dentro de esta lista, no se pueden incluir los de su propia marca ni tampoco se podrá cobrar retrocesiones de los productos que se hayan recomendado para la cartera.
En el wealth management, la atención no se pone en los productos en concreto, sino en todo el proceso, que implica coordinar diferentes ramas muy especializadas. Así, se incluyen aspectos como el análisis de las estructuras legales más idóneas para invertir, la administración de los activos, el marco legal y jurisdiccional, el impacto del régimen fiscal en las inversiones, la planificación de las sucesiones, las diferentes estrategias de inversión y diversificación o la gestión de riesgos, entre muchos otros aspectos.
En definitiva, este proceso comienza con la definición de unos objetivos relativos a la liquidez, los plazos de inversión, el riesgo o las restricciones; la identificación de los escenarios de cara a la protección de activos, y el diseño de una estrategia definida de inversiones basada en las necesidades y los objetivos anteriores. Y, finalmente, el desarrollo de informes transparentes que evalúen la gestión de todo el patrimonio conjunto, así como el rendimiento de cada inversión propuesta.
Coste y remuneración
Otra de las diferencias entre asset management y wealth management es el coste relativo a ambos, o el beneficio que obtienen quienes ofrecen la gestión y el asesoramiento. En el primer caso, las entidades aplican una comisión por los productos personalizados que se ofrecen. Para cobrar estas retrocesiones, se firma un contrato donde se establece la retribución por los servicios.
En el segundo concepto, lo que se aplica es una tarifa por todos los servicios prestados, así como una retención por el patrimonio que se gestiona. Una diferencia notable es que desaparecen los conflictos de interés, por lo que la confianza en estos servicios es más alta.
Por lo general, salvo que se hagan excepciones, la gestión de patrimonios comienza a partir del millón de euros. Si lo que deseas es invertir tus activos y obtener una rentabilidad por ellos, pero no terminas de confiar en el asesoramiento parcial de tu entidad bancaria en asset management, en Strike Four AM trabajamos con agentes independientes y con múltiples entidades. Si lo que deseas es rentabilidad, buscamos el producto más adecuado para ti sin que haya conflictos de interés. Contacta con nosotros y te asesoraremos sin compromiso.